24 agosto 2008

Juegos de Pekín: Medalla de plata en baloncesto

24/08/08

Acabo de ver y vivir el mejor partido de baloncesto de mi vida. Y probablemente, el mejor partido de baloncesto de la historia en unos Juegos Olímpicos.
Estos tíos son acojonantes. En la previa, EEUU nos arrasa. Pero en los momentos importantes, los Navarro, Rudy, Gasol, Jiménez...se crecen. Y de qué forma: ¡¡¡¡A 2 puntos al final del último cuarto!!!! Asombroso. Asombroso, porque enfrente tenían a la selección más potente que EEUU podría traer: buen tiro exterior, robos, asisitencias, rebote...Si esta final hubiera sido contra cualquier otro equipo del mundo, hubiéramos vivido una final tan tranquila como la de Japón frente a Grecia.

Han hecho historia con este partido, y seguro que lo saben. Sobre todo Ricky, al ser el deportista más joven en conseguir una medalla.

Es curioso cómo hacemos nuestros los logros ajenos, y cómo nos motivamos al ver ganar a desconocidos. Pero el deporte tiene algo especial, y si es Olímpico, más todavía. Muchas gracias. Gracias por este vuestro triunfo. Por este nuestro triunfo.

Lo peor, la retransmisión de TVE con Romay. Lo que tiene que aguantar el pobre Arsenio...

PD: ¿Por qué Aíto? Porque es la ostia.

18 agosto 2008

Templo: sólo en vacaciones

18-11-2008

Supongo que más de uno y de dos se habrán preguntado dónde me he metido durante todo este tiempo. Que por qué llevo tanto tiempo sin escribir. Espero que ninguno pensara que me he cansado del blog, de escribir o, peor aún, de asistir a conciertos.

Lo que pasa es que como todo, pues estaba de vacaciones. Pero no musicalmente. He asistido a conciertos, pero de una índole distinta a la habitual. Esta vez, subvencionado por el ayuntamiento de Acebo, he disfrutado de la típica verbena española. Sí, sí. Esa que sólo mantiene la España profunda y que poco a poco se va perdiendo. Esa que empieza con pasodoble y acaba con clásicos rockeros para los jóvenes (y no tanto) que se atreven a aguantar hasta el final. Esa que a más de uno le parece ridícula pero que a mí, particularmente, me parece encantadora.

La orquesta Templo, para no ser menos, siguió al pie de la letra con el guión: pasodobles - rumbas - pachanga - pop clásico - pop actual - rock nacional - rock internacional. Desde Suspiros de España hasta Mueve tus caderas, pasando por Highway to Hell y por Jesucristo García. Todo ello con tono de organillo de todo a 100, pero encantador. Estos pueblos sí que se lo saben montar bien. Probablemente una orquesta de este estilo es donde acabarán todos los rebotados de OT, pero aun así no sé si estarán a la altura. Al fin y al cabo, sus voces no creo que aguanten conciertos de 5 horas y media, y con tanto cambio de registro, sin que haya un "profesor" mandón que les diga lo que hay que hacer.

En fin, que estoy encantado. Y con fuerzas renovadas para seguir el resto del año.


Un redescubrimiento interesante: Inmaculate Fools

02 agosto 2008

Rock nacional en Veranos de la Villa

01/08/08

Hacía un mes desde el último concierto. Demasiado. Prometo no haceros esperar tanto la próxima vez. Pero como en otras ocasiones, el retraso, supongo, ha merecido la pena.

Madrid en verano es un hervidero de conciertos, festivales, teatro y otras facetas culturales que hacen que quedarse aquí sea, de vez en cuando, un privilegio. Al igual que es poder disfrutar, en un mismo concierto, al aire libre, y por módico precio, de dos clásicos como Jaime Urrutia y Los Burning (o Johnny, el único Burning original que queda).

La gente empezó al igual que el concierto, sin apetito musical. Urrutia se tomó demasiado al pie de la letra el hacer de telonero de Johnny. Con puntualidad insultante, durante los 50 minutos que tocó, se limitó a repetir el cancionero de su disco en directo en la Joy, casi en el mismo orden. Bastante pobre, la verdad. Sólo hubo un momento para la improvisación, con un tema de su disco Camino a Soria. Se dejó atrás grandes clásicos, pero ya estaba todo el pescado vendido. El concierto era para Johnny. Y no decepcionó.

A sus teclados, hizo disfrutar muchísimo al personal (> 40 de media). Nadie se quedó sentado. Todo el mundo se agolpó sobre el escenario al sonar himnos ochenteros como Mueve tus caderas, Una noche sin ti, Esto es un Atraco... que a más de uno hizo que se le cayeran las lágrimas y recordaran su años mozos con pelo, barbas sin arreglar, camisetas sin mangas y, probablemente, con algún chute de más.

Tras una hora larga, Johnny volvió al escenario con Urrutia para hacer un cover de la canción Let's stay together, de Al Green y ampliamente versionada (un ejemplo, por Bryan Ferry: http://www.youtube.com/watch?v=bZTsW8WKy5c). Un buen final.

Quizás no esté en mi top ten de conciertos. Pero hacía mucho que no asistía a uno. Gracias chicos.